En el comienzo del clip, la cantante de 22 años de edad aparece en un par de pijamas cuando le dice a su novio en la pantalla que su relación ha terminado para siempre.
Tay estaba tan entusiasmado con la canción que ella twitteó algunos secretos en el set: "Datos curiosos sobre el vídeo 'We Are Never Ever Getting Back Together'. Está todo en una sola toma, filmada con una sola cámara y 5 cambios de vestuario".
¡Échale un vistazo a continuación!
No hay comentarios:
Publicar un comentario